FotografÍa: Redacción CIgdl.
En un encuentro que será recordado como uno de los más intensos de la temporada, el Real Madrid logró avanzar a la final de la Copa del Rey tras empatar 4-4 con la Real Sociedad este martes en el Estadio Santiago Bernabéu. Gracias a su victoria 1-0 en el partido de ida, los merengues sellaron su pase a la final en un choque lleno de emociones y giros inesperados.
Desde el inicio, la Real Sociedad mostró una valentía notable, consciente de que necesitaba revertir la desventaja del partido anterior. Con un planteamiento ofensivo, los vascos se pusieron en ventaja rápidamente, marcando el primer gol a los 16 minutos. Lejos de buscar refugio, continuaron atacando, y a los 82 minutos, se encontraban con un 3-1 a su favor, lo que parecía asegurar su boleto a la final.
Sin embargo, el efecto “hechizo Bernabéu” se hizo presente. En un giro dramático, el Real Madrid logró igualar el marcador en cuestión de minutos, asegurando su clasificación gracias al resultado global. Pero la emoción no terminó ahí. En un último suspiro, Mikel Oyarzabal sorprendió a todos con un gol en el minuto 93 que llevó el partido a la prórroga.
Con un Real Madrid más fresco físicamente, el juego se tornó a su favor en el tiempo suplementario, aunque la Real Sociedad no se dio por vencida y lanzó peligrosos contraataques. Cuando todo parecía indicar que el destino del partido se decidiría en una tanda de penales, llegó el momento decisivo. En el minuto 115, un córner ejecutado por Arda Güler encontró la cabeza de Antonio Rüdiger, quien se elevó para anotar el gol que selló el 4-4 y aseguró la clasificación del Real Madrid a la gran final.
Este emocionante encuentro en el Bernabéu no solo destacó la valentía de la Real Sociedad, sino también la determinación y el carácter del Real Madrid, que una vez más demostró que en su casa, la historia se escribe de manera épica. La final promete ser un espectáculo inolvidable.
