Fotografia: Redacción CIgdl
Cuauhtémoc Blanco, exgobernador de Morelos y exfutbolista, se reunió con diputadas de Morena en la Cámara de Diputados, justo antes de que se discuta la solicitud de desafuero en su contra por presuntos abusos sexuales. Durante el encuentro, Blanco reafirmó su inocencia y rechazó las acusaciones, que atribuyó a una vendetta personal del exfiscal Uriel Carmona, a quien acusó de estar ligado al crimen organizado.
“Soy incapaz de violar a una mujer. Tengo principios y una educación que me la dio mi madre. No soy un asesino, ni un ratero, ni un violador, estoy cansado de esto”, declaró visiblemente afectado ante sus compañeros de bancada, mientras las diputadas alzaban la voz en apoyo, gritando: “No estás solo, no estás solo”.
El exfutbolista también se pronunció sobre las acusaciones de homicidio en relación con el caso de Juan Manuel García Bejarano, ocurrido en 2017. “Ahorita también sale otro video que ahora soy un asesino. Estaba de vacaciones cuando asesinan a esta persona y me echan la culpa a mí. Me tuve que regresar a dar la cara”, explicó.
Blanco insistió en que no existen pruebas en su contra y calificó las acusaciones como injustas. “He sacado la casta adelante por mi familia. Me costó mucho lograr lo que logré, ser futbolista, ser uno de los mejores futbolistas de México, y aquí estoy, y se me está acusando injustamente”, afirmó, resaltando la importancia de su legado familiar y profesional.
