Fotografía: Redacción CIgdl.
El Atlas se niega a morir. Con más corazón que fútbol, los rojinegros sacaron un sufrido triunfo 2-1 ante Querétaro en La Corregidora, resultado que les permite mantener con vida una tenue esperanza de clasificar al Play In del Clausura 2025. Sin embargo, el panorama sigue siendo sombrío para los tapatíos, cuyo destino ya no depende solo de ellos.
Carlos Orrantia encendió la ilusión con un golazo al minuto 32, una bocanada de oxígeno para un equipo que ha naufragado durante gran parte del torneo. Pero como ha sido costumbre, Atlas volvió a caer en sus errores. Al 82’, Adonis Preciado empató para Querétaro, dejando en el aire la sensación de otra jornada para el olvido.
No obstante, el dramatismo no había terminado. En tiempo de compensación, al minuto 92, apareció Uros Durdevic desde los once pasos para devolverle el alma al conjunto rojinegro. El delantero montenegrino llegó así a 11 goles en el certamen, quedando a uno del líder de goleo, Paulinho del Toluca.
Pese a la victoria, Atlas suma apenas 17 puntos y sigue dependiendo de combinaciones poco probables para acceder a la fase final. Su última carta será el Clásico Tapatío frente a Chivas este sábado en el Estadio Jalisco. Pero si Pumas vence a Santos Laguna esta noche, el duelo quedará sin valor competitivo: los Zorros estarían oficialmente eliminados.
Una vez más, el equipo del par de estrellas se queda corto. Entre inconsistencia, lesiones y decisiones cuestionables, el Clausura 2025 se perfila como otro torneo para el archivo del desencanto. En lo individual, Camilo Vargas cierra como uno de los pocos rescatables. El arquero colombiano ya piensa en su rehabilitación, pues se someterá a una limpieza articular en la rodilla derecha al término del torneo.
La esperanza muere al último, pero en Atlas, parece que solo sobrevive por inercia.
